Generalmente cuando estás en busca de empleo muchas veces buscas tener una buena presentación personal y organizar tu curriculum, pero muy pocas veces hacemos una programación mental que nos lleve al éxito. Cuántos casos has escuchado de personas con perfiles modestos y han logrado quedarse con cargos importantes, dejando atrás aspirantes con una gran experiencia y preparación académica. Pues bien, está comprobado que muchas veces el éxito en una entrevista laboral, no necesariamente radica en la preparación y/o experiencia sino en la actitud.
Seguramente hemos escuchado mucho está palabra, pero la pregunta es… ¿cuántas veces la aplicamos a cabalidad en un proceso de entrevista? Todo comienza desde que encuentras la vacante. Por eso te daremos unas recomendaciones o tips para desarrollar una buena actitud y mejorar tus posibilidades de hacerte al puesto que estás buscando:
1. Visualízate en el cargo una vez encuentres el anuncio, es decir, imagínate todo el proceso y tu como un triunfador.
Evita decirte verbal o mentalmente cosas negativas, como ¿será que me irá bien? ¿qué tal que me ponga nervioso? ¿seguro me tocará la persona más estricta?, entre tantas otras.
Está comprobado que más del 60% de lo que pensamos en el día, no lo hablamos, solo lo interiorizamos a través de conversaciones internas y suele darse que muchas de estas “conversaciones” son negativas, lo que se refleja en la mente subconsciente.
Esta mente subconsciente no sabe diferenciar lo bueno de lo malo, todo lo asume y lo interioriza como una realidad. Lo que, si va a pasar, es que una vez tu actúes, el cerebro determinará tu comportamiento o reacciones con los patrones que más le hayas interiorizado a tu mente subconsciente, ¿y qué crees? si inculcamos cosas negativas, pensamientos de derrota, nerviosismo, dudas, etc., asimismo será tu accionar.
Conclusión: Evitar decir o hablarte así mismo frases negativas.
2. Haz un pitch de presentación, cuantas veces puedas (sobre todo constrúyelo mentalmente), es decir, imagínate frente al entrevistador o público hablando de ti y lo capaz que eres.
3. Sin importar tu poca experiencia nunca te sientas inferior, sube tu autoestima a su máxima expresión y convéncete…eres el mejor.
4. Revisa tu lenguaje corporal, tus muletillas y haz un demo de presentación con alguien de confianza (pero que te diga la verdad).
5. Ahora sí, alista tu mejor vestuario, sin exagerar, es decir, término medio y analiza previamente el código de vestimenta de la empresa, no olvides en el aliento fresco, y una imagen radiante.
En pruebas tipo Assessment center esta programación mental es clave, por eso la preparación previa incide mucho y casi que te garantiza éxito o por lo menos dejar una muy buena impresión.
Atención con esto, estos tips no solo aplica para la búsqueda de empleo, aplica para presentación negocios ante inversionistas, socios, entre tantas situaciones similares.
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